En el momento menos oportuno
igual como él, quisiera ayudarla a cambiar. La primera persona que se le vino a la mente fue Ower, así que decidió llamarlo y cit
nsado, el pobre debía estar pasando noches en vela
ya había pedido dos limonadas que reposaban en la mesa.
de tiempo me haya llamado -c
rió algo apenado-, yo me acu
in poder creerlo-. Más bien
-contó Víctor mientras bajaba l
pensamientos ya se estaban haciendo realidad. Vio el vaso de limonada y las gotas de agua en
la universidad -explicó Víctor
buena noticia -sol
a su amigo-. Ella quiere salir adelante, pero para eso necesita persona
lar d
ado por la falta de interés de su amigo- De sus
seguro y él tenía la manía de entrar sin avisar al cuarto de esta, por ese motivo abrió repentinamente y pudo ver que en verdad lloraba. La encontró en un rinconcito de su
. tenemos esa hermandad que otros tienen -trató de exp
ícate
ncómodo para mí el sólo hecho de llegar y preguntarle sobre sus problemas y que yo la consuele con masajitos en la espalda -la piel de Ower se erizó c
dió rápidamente, en verdad, habló sin pensar; solam
te, puedes aconsejarl
así d
ido floja, eso es
r-. Ella quiere graduarse y por eso la estoy ayudando, p
nido, ¿es que acaso no
a tratan
y para serte
su pecho, no podía creer que el propio
que estabas preocupado -alegó Víctor con tono serio-. ¿Dónde quedó
ra ir a la casa de ese tipo y revolcarse con él. Anna tiene esa pésima relación porque ella misma se lo ha buscado y yo, al igual como mi mamá, por más que intentamos ay
e -dijo Víctor con seguridad-, habla co
ar de su silla. Estaba dudoso, ¿qué había pasado entre Víc
l fondo se escuchaba música, esa misma que siempre ella ponía a gran volumen. Se acercó hasta la habi
iendo? -preguntó su h
o... ejercicio...
ió mientras se recostab
detuvo de top
e de
olvía a retomar su ejercicio-
-inquirió el joven mientras pasaba la
¿po
ablar enseguida con ella-, sólo que me cont
a sig
cía para sí misma Ann
y el dolor en su abd
s dos primeras horas
do el cuerpo... -replicó cuando la maestra ordenó
rte hoy para que se te quite el dolor en el
con una joven morena y alta. Anna sabía que ella se llamaba Eva, a principios del año escolar llegaron a ser amigas, pero después Anna se separó de ella; l
y conversaban alegremente y eso hacía qu
ompañeras. Al terminar de bañarse, vio a Eva observarse en el gran espejo del baño, s
pero como solía ser una chica alg
e los lavábamos Eva había p
restas? -
a alguien que agarraba cualquier conversación tonta
-respon
cepillo y comenzó a p
a clases -dijo Eva con una
ién sonrió- como todo
para la noche blanca? -inq
sar el año -respondió Anna mientra
mente seguro que te vas a graduar -Eva recogió algunos maquillajes del tocador y los g
ía llegado al punto que deseab
o ocultar su impre
ía decir
ada- qué buena noticia, felicidades. Víctor es un
s -Anna le pas
ltó Eva emocionada- Ese tontarrón
muy am
lesia y hemos estudiado juntos desde jardín. Pero mira que consigue novia
nes n
tras hacía un puchero- terminamos a los dos meses. Pare
-Anna sentía un gran a
y ya lo superé. Gracias a Dios me di cuenta a tie
e sinceridad. Los ojos de Eva brillaro
iempo llevan?! -soltó un pequeño grito de emoción- Nunca imagin
cosas y salía junto con Eva, explicaba (de manera bas
s y se sentaron juntas par
ano -confesó Eva con algo de desgana-, cada vez
rrugó el rostro- con su rost
e Anna estaba en todo lo cierto. Dejó
cia de Víctor -soltó Eva-. Él c
.. -sol
a esquina de la mesa frente a Anna y besó su frente. Eva l
en guardado -dij
a pequeña risita
susurró al oíd
r, era tan dulce y tan... "Creo qu
ferente! ¡Qué envidia! Anna había ganado el premio gordo teniendo de novio a Víctor. La joven lentamente volteó a v
te, una relación como aquella no era bien vista ante la sociedad. De hecho, la propia Eva debía aceptar que no le convencía mucho que fuera a funcionar, sin embargo
y tenían muchas cosas que contarse, decidieron merendar
igos, también que hasta el momento (ya siendo casi finales de
Anna, se dieron cuenta que ninguno de ellos dos quería un tercero. Ese era su momento de pareja, alg
castellano -dijo Eva
os, amiga -
les voy a ayudar
clases. Debían dar filosofía y aquel profesor solía ser algo
s aquí y me imagino que habrás hecho tu trabajo, como faltas tanto y todas tus notas que tienes conmigo son malas, y
los ojos de Anna, ella estaba nerviosa, se sentía en un momento frío, rodó su mirada hasta Víctor y este le mostró una sonrisa muy tierna. La joven sintió que el tiempo se detuvo en el momento en que él sonreía, sintió un bajón y un pequeño "cl
a antropología es una rama de la filosofía que estudia al
inó todos hicieron silencio, al p
dijo el profesor mientras ha
tardes repasaba con Víctor y los lunes y miércoles Eva los acompañaba. Ella intent
staba en las piernas del joven y él le acariciaba el cabello mientras, en repetidas oca
mpre y la felicidad de A
se marchó de su casa, Anna e
? -se preguntó Anna mientra
gran manera al ver a L
bécil que me has estado
partó a Anna y e
veces! -gritó Leo-, ¡ve
ró los ojos al ver q
meció desde los hombros-, ¡¿en serio es
os ojos y lo obs
solo
¡habla bien
del colegio -respondió
retorcida mientras
rado tanto en alguien -replicó
e dijiste que yo no era capaz de seducirlo y eso hice,
ablaba en serio?! -volvió a alzarle la mano-, ¿cómo se te ocur
o que
uerza Leo-, ¡¿qué te pasa?!, ¡¿me est
favor, baja la voz que l
a que se enteren l
entras cerraba los ojos e intentaba calmarse, pero
íra
os ojos con
con el tipejo ese -la tomó del cu
cieron hinchados y por más maquillaje que se aplicó, no pudo ocultar sus ojos maltratados, al igual como el moretón en
dijo- todo
ver a Víctor si en cualquier momento Leo la podría ver y formar un gran problema. Lo
a -llamaba
u plato de cereales y observ
as clases que te da ese ch
Víctor? -pr
ó la señora mientras rod
go mío -res
es? -indag
és a otros temas. Anna volvió a bajar la mirada
ínate que se ganó una beca para estudiar
rá una bastante presti
buena persona. Es el presidente del consejo estudiantil y el vocero de su salón,
do a ese muchacho para conocerlo?
la vez pasada que llegaron mis ami
oltó dudosa-,
o de Ann
mujer quedó pensati
a de ella de años. Le he dicho muchas veces que oficialicen lo suyo, debo pregun
ar a su hermano c
y él son novi
a Eva? -in
studiamos
an de años y siempre est
, ellos son mejores amigos de la infanci
an -aclaró Ower-. Si te lo digo es por algo. Esos traen su enredo desde hace rato, además, hacen linda par
tomó la taza de cereales para
? -preguntó
ió Anna desd
ayas a la universidad -pidió la señora-, no quiero q
-aceptó
prano al colegio gracias a su h
ando se estacionó
ó a ver antes
en -Ower sonrió-, sigue a
tó Anna antes
egaban temprano al igual que ella. Entró al salón de clases y encon
ludó Víctor bast
a un poco de cabello detrás de una oreja co
respondió Víctor-. Debo p
sta su puesto y de
es tan temprano -comentó Víct
entras se acercaba a él-. Parece que
Víctor escribir en el tablero. Se dio cuenta que él tenía buen pe
lo estaba mirando y se acercó
de algo?
on una sonrisa-, solame
ellos allí. Volvió a mirar a Anna y la besó con mu
cha impresión. Debía aceptar que Víctor besab
Víctor-. Mi princesa, mi primavera, m
or qué Víctor siempre la llamaba "princesa", ¡era por aquella
sita, prisionera de este amor que no se rinde... Que no se rinde... -con una de s
a Anna y notó que esta
tó Víctor al ver el re
Su corazón empezó a latir con fuerza y u
do tan bien como lo hacía él. Tenía miedo, muchísimo miedo de perderlo. ¿Qué iba a hacer si toda la verdad salía a la luz y é
sértico de almas. Anna se encontraba en el último piso que era el cuarto, allí había un largo pasillo que en el fondo sólo tenía la única puerta, estaba hecha en madera oscura. A ella nunca se le pudo olvidar ese día, lo recordaba bien, el
ar allí, no en ese pequeño escondite. Sentía que con los problemas de sus terribles notas y lo mala persona que era, ella no debía estar allí, no lo merecía; tampoco mer
los problemas, aunque, para ella todas estas soluciones eran imposibles. Así
s los estudiantes; esto era con el fin de mantener informados a los estudiantes de cómo iban, por algo de curiosidad buscó las notas de Anna y
ecirle! -solt