El espejo roto
una maldición que solo la tenian las mujeres, su maldición era que cada mujer de su familia estaba destinada a vivir en en amar
ntiguo pueblo natal pues tenía que reglar un
spués de casi 10 años ana estaba regresando nuevamente a su pueblo pero su objet
entras limpiaba el desván de su casa en busca de objetos olvidados. Mientras sus manos exploraban entre viejas cajas y muebles cubiertos de polvo, una forma brillante ca
a sensación de malestar se apoderó de ella, como si una sombra del pasado la hubiera envuelto en un abrazo frío
enes confusas y recuerdos borrosos comenzaron a invadir su conciencia, como fragmentos de un sueño olvidado. Ana se si
s? Ana se prometió a sí misma encontrar respuestas, pero no podía evitar sentir qu
fundidades de su mente. Cada paso que daba resonaba con un eco de recuerdos confusos y aluc
entraba en un mundo de incertidumbre y misterio. La luz del día filtrada por las ventanas parecía menos aco
r profundamente, cerrando los ojos para alejar las imágenes perturbadoras que seguían atormentándola. Pero incl
tratando de ordenar sus pensamientos caóticos y encontrar alguna pista que pudiera ayudarla a entender lo que estaba sucediendo. Cada p
roto y cómo podría afectar su vida en el futuro? Ana sabía que no descansaría hasta descubrir la verdad detrás
n momento de esa atmósfera cargada de emociones y confusión. Decidió salir a dar un paseo por el tranquilo pueb
edades que siempre había encontrado fascinante. La idea de buscar información sobre el espejo ro
rodeada de objetos antiguos y curiosidades de todas las épocas. Se acercó al most
edo ayudarle? -preguntó el
me preguntaba si tal vez usted sabría algo sobre su origen o su historia
escripción del espejo. Luego, con un gesto reflexivo, se acer
uelen tener historias interesantes detrás de ellos -comentó el h
a resolución de ese misterio que la había consumido desde que encontró el espejo roto en
Ven, sígueme -dijo, indicando a Ana que lo s
qué secreto podría estar a punto de revelársele sobre el misterioso espejo roto q