Todo para tenerte
ños
para cualquier músico, una ofensa al talento de sus amigos, pero Rain Music era una productora que estaba subiendo como la espuma y no po
o tendremos que cambiar el nombre de la Banda. - aquello a Josh no le hacia ninguna gracias, pero mostró su cara in
sarlo. ¿Por qué no aceptaríamos? Es una
os, tocamos música, no estamos para hacer acrobacias sobre un escenario porque un tipo en
en voz baja el
egunto Davin
lento, los que solo valemos pa
decir que prácticamente lo único que tienen es una cara bonita y
, - no todos tenemos tú mismo talento, debemos aprovechar la
ue pareciendo algo absurdo, es
s que quieras aceptar su primera propuesta y terminar cant
jaría de lado, solo quiero q
po a mejorar hasta que podamos cantar nuestras propias canciones, por ahora nos conformaremos con esto. - el chico de cabello negro
, hagámoslo
solo podía pensar en su actitud de las últimas horas y de pronto el beso dejó de parecerle tan emocionante. - Bien ahora vamos a beber y celebrar por nuestro fu
an emocionada como ellos observaba distraída por la ventanilla, cuando de pronto en el medio de la acera frente a un restaurante cerrado vio a una niña pequeña. Miraba alrededor con sus pequeños ojos
menzó a llorar más fuerte. - tranquilo cariño, yo te voy a ayudar. ¿Cómo te llamas? ¿Sabes hablar? - Davina contin
como loca del coche? - gritó Yvonne
me acerqué a ver qué sucedí
rece pronto a buscarla. Mejor vamos Josh está parqueando al doblar esperando y todos queremos beber y festejar. - Davina se fijó en la pequeña, las palabras de su amiga parecían ciertas, la niña está bien vestida y arreglada, parecía que se acababa de perder, era muy chula con unos
quedaré aquí 10 minutos, si sus padres no regresan la
, ve pensando como relajar a Josh porque estoy
tengo. – respondió despidie
la calle y sentarse allí a esperar, pero vio que el dueño del café estaba allí y él no sabía de los favores que solía hacerla a Yvonne, así que no la conocía. De todas formas, no era buena idea seguir alejándose, lo mejor era que niña estuviera justo donde la había encontrado por si alguien iba buscándola. Pasaron 10 minutos, luego 20 y cuando ya había trascurrido media hora Davina supo que había hecho bien en quedarse, la niña ya se había cansado de jugar con el t