Tras la máscara de su fea esposa
lar, vacilante, y le
antándose del sofá en medio de la noche, moviéndose
aba los ojos, con la voz carg
do se descontroló. Le arrancó la camisa del pijama, lo abrazó por la cintura como si fuera un peluche, apoyó la pa
, en el banquete de bodas, se había rendido y tomado una copita de vino, princ
pita no parecía hacer daño en ese momento, pero aparentemente los efectos se manifestaron durante la noche. Intentar explicar que "cariño" era el nombre de su gato de
gastar saliva intentando explicarse. "Supongamos que estaba s
jos brillando con picardía mientras le acercaba el
estómago. Aun así, tocó el
scadas a su alrededor como un pulpo enamoradizo. Desde la cama, su voz se escuchó po
na nalgada y dijo: "¡Una palabra más y
na se quedó quieta, con las mejillas encend
lla. "Eres adorablemente feroz. Lanzando amenazas
s cobijas y salió corriendo de la habitación
se bajo las cobijas y fingir que estaba dormido la noche anterior, había esperado el inevitable regaño.
eguro y se tironeó del pelo como si pudiera arrancarse la vergüenza. Murmuró una sarta de maldicione
erta. La voz de Cole se escuchó, ligera y juguetona. "Cariño, el tiempo a
llegaba la mañana siguiente a la boda, cuando se esperaba que los recién casados saludaran a los ancianos como es d
e, decidida a no reaccionar al humor que danzaba en los ojos d
". Le entreg
so a trabajar. Ducharse. Cambiarse de ropa.
e le había insinuado. Tal vez su maquillaje no había sido lo suficientemente terrib
a con cuidado. Al ver a su esposo esperando justo al
compostura. Un tic en el labio, apenas reprimido, se
na se plantó la peluca despeinada
no darle un infarto a mi abuelo. Tal vez debería
der, Cole la agarró de la mano y la
cable y reluciente, con todos
que Jarrett Evans, el padre de Cole, se sentaba con rigidez a su derecha.
omento en que Cole y Elliana entraron, con las manos unidas co
o creían en la idea de que Cole tocara a una mujer que consideraban inferior a ellos. Los susurros apuntaban más a la violencia que a la intimidad. Esperaban ver a E
aso la pareja había tenido relaciones? La tensión se intensificó. Nadie había previsto esto: al orgul
, guiando suavemente a Elliana de la mano mi
ro ramas principales, con tres hijos y una hija,
se había retirado del liderazgo cua
spués Emmanuel Evans y, por ú
recibió los primeros saludos, y Jarrett los segundos. Ninguno parecía emocionado de ser servido p
idades, toda la familia se tr
ro, sintió las miradas afiladas: algunas meramente curiosas, otras llenas de juzgamiento o de una burla apenas velada.
gesto orgulloso y dijo con voz altanera y mordaz: "Elliana, ¿te das cuenta d