Su Matrimonio de Lástima, Mi Feroz Regreso
/0/21586/coverbig.jpg?v=256a1d4a0930c37a58660bc8f10dbc8a&imageMogr2/format/webp)
ral reveló que mi prometido se había c
". Desechó nuestros siete años juntos, me ofreció dinero para q
, gruñó, amenazando con
Estaba embaraz
esgarradora y en secreto interrumpí el embarazo. Cua
onde planea aceptar nuestro premio con su nueva esposa, voy a subir al escenar
ítu
Aurora
viral destrozó mi mundo, afirmando que mi prometid
a la tormenta digital que se gestaba en mi pantalla. Me había escapado un momento, necesitaba un espacio tranquilo para respirar antes de que la locura de nuestra lujos
ikTok: una chica, Kiara Pérez, sonriendo a la cámara. Se me hacía familiar, pero no pod
demasiado real. Luego, una foto de ella, más joven, en un evento en el campus universitario. Una feria de tecnología. Nu
ue se fijaría en mí", declaraba su voz en off, cargada de emoción. "Siempre enfocado en ella.
nte, sosteniendo un pequeño y modesto documento. Un acta de matrimonio. La fecha era de apenas una se
o. Repetí el video, mis dedos torpes. El mismo nombre. Jacobo Garza. Mi Jac
tenía un nudo en la garganta, mi cuerpo estaba congelado. Mis ojos se desviaron hacia la ventana, vie
lada y observadora, siempre al margen. Apenas me había fijado en ella, tan consumida estaba yo con Jacobo y n
s años, por fin tienes a tu hombre!". "¡Aurora Espinoza no sabrá ni qué la golpeó!". El
ulsaba con un brillo azul enfermizo. Era de la propia Kiara
u vestido de novia, a momentos de caminar hacia el altar con un hombre que ya se había casado con
i vida? ¿Ya estás lista? Jacobo está preguntando
pantalla aún brillando débilmente. Jacobo. Estaría aquí en cualquier momento. ¿Cómo pudo? ¿Cómo
con una sola rosa blanca en la mano. Sonrió, esa sonrisa perfecta y deslumbrante que solía derretirme
sus dedos rozaron los míos. La rosa se sentía
lo que ahora veía como una mentira grotesc
encontraron con el aire. Mis manos temblaban, aferrando la rosa. "Jacobo", m
nuestra boda? Mi amor, sea lo que sea, puede esperar. Nuestros invitados
e esperar". Mi voz ganó un temblor
ntes de que se recompusiera, su farsa perfeccionada. "¿Kiara? ¿Quién es Kiara? Aurora, ¿de qué estás hablando? ¿Estás nervio
la loca. Ya. Mi mente corrió, recordando innumerables pequeños momentos, pequeñas dudas que había ignorado
s a fingir que no sabes quién es". Mis ojos ardían en los suyos, buscando cualquier señal de verdad, cu
ien, Aurora. Si insistes en ponerte dramática justo antes de nuestra recepción, entonces bien. ¿Qué pasa con esta Kiara? ¿Alguna exbecaria resent
narrativa, hacerme sonar como una loca. Mi mano instintivamente alcanzó la almohada, mis ded/0/14726/coverorgin.jpg?v=d1e13b96db36c24ec32d4b8796ff67d8&imageMogr2/format/webp)
/0/20920/coverorgin.jpg?v=f23a76005c28ffc88e1b54a095aaf950&imageMogr2/format/webp)
/0/17825/coverorgin.jpg?v=6abd6ed2e94008192eec8f6db5e0e29c&imageMogr2/format/webp)
/0/20441/coverorgin.jpg?v=f5fdb119d2d54c971c3685aee7b669bf&imageMogr2/format/webp)
/0/16208/coverorgin.jpg?v=c1be4cb207738d56bb6b2af3932e6c33&imageMogr2/format/webp)
/0/19408/coverorgin.jpg?v=ce8944e0ac523f1d1e44700109025fab&imageMogr2/format/webp)