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dejar llevar por cualquiera, ahora que justamente fue con el hombre que horas antes me había hecho dar mucho coraje, no sé qué definitivamente tenía en ese momento en la

y también dicen que no lo han visto con ninguna novia en años, quien sabe si ya no le gustan las mujeres, puede ser el caso, aunque no me importa, ese muchacho creído e igualado que le dejo el corazoncito roto a una niña que lo veía precioso,

mis padres estaban un poco reacios a mi decisión y por la comodidad vivo cerca de la clínica v

es te aman sin ninguna pretensión o doble intensión y sobre todo no te engañaran. Al hombre con el me case hace mucho no le gustab

ida o el destino no sé quién mismo es, no me darán la oportunidad, o al menos eso es lo que

os desde la escuela, y pues por cuestiones de la vida llevaban muchos años sin verse, ahora con todos sus hijos grandes y unos ya con su vida hecha, decidieron reunirse y conversa

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ocedí a entrar, saludé primero a Don Oscar Raúl Bennet, quien me dio un abrazo efusivo, luego de eso salude a mis padres y hermano, por último, salude a Oscar, el hijo mayor de los señores Benn

cuando alce la cabeza, me tope con esa mirada intensa de Raúl, que para variar era el mismo

tarde, pero es que a la señorita Cristal s

es que ya están en

ras apenas un jovencito la última

tenemos de no vernos, ¿verdad? – dice el cretino este, para luego di

estés aquí compartiendo c

ermano, y al hermano de él

e sino te veo con tu familia no te hubi

cara a mi se me olvido p

de los saludos, me fui a conversar con Cristal, pues ella y yo teníamos la misma edad cuando ellos se cambiaron de ciudad, y pues era evidente que no nos r

mi hermano, y como había sido la señora Telma la que me asignó el asiento, no le quise hacer el feo. Por su part

te, y como el viaje de regreso a mi departamento era de dos horas, decidí que antes que se hiciera más tarde me iría, me despedí de todo

un ruido un poco fuerte y que la velocidad sin más ni más empezó a bajar, hasta quedar completamente estancada en la carretera, para rematar est

cer teniendo los mismos problemas que el mío o al menos parecidos, para mi mala suert