Corazón de Limón
as, me bañé rápidamente, me sequé y me dirigí hacia mi litera, saqué de mi casillero una camisa polo negra, mis zapatillas Nike blancas, un je
on y Wally, uno de mis compañeros de unidad con quienes ha
-preguntó Rick
campera. Nos dirigimos hacia el estacionamiento donde estaba estacionado m
le haya dado permiso para salir -di
en la palabra jefa, le di un golpe en el hombro a modo de broma, puso un tono de voz autoritario, muy parecido al de los super
tos los auriculares! -reí, Ted siguió imitando a una aut
irle permiso a la mía con dos semanas de anticipación para que luego me diga «¿Sabes qué? Mejor no, ¡te est
todas las lesbianas son marimachos y machonas -aclaré-. Es muy raro ver
te denunciaría por mac
e Annie te diera permi
ue formar lazos con la unidad es de vital importancia para un
ter, dejé salir una risa pero era obvio que Dios me habí
s y gente paseando por las calles, manejé lentamente mientras buscaba el bar Makondo, pero tuve que estacionar el Jeep un tanto alejado del bar pues
ck, la música estaba lo suficientemente fuerte como para conversar pero para no escuchar las conversaciones de los demás aunq
ión; nos acercamos a la barra, un chico con muchos piercings en la
tomar? -preg
as -gri
, como era el conductor designado debía mantenerme sobrio,
chacho, yo fruncí los labios, pues si sólo había alcohol para beber m
eza en botell
aso de cerveza Miller; chocamos nuestros v
os a bailar!
emas por bailar con no
se entera! -resp
tin! -insi
a controlar que no hagan idioteces desde
pista, me giré hacia la barra para pedirle al barman un plato de frituras y alguien me tapó los ojos con las manos, al tocarlas me d
aba y había rechazado varias veces, tenía ojos azules y cabello negro, era bonita tanto de rost
esencia me molestaba, pero ella me abrazó de repente, dándome tiempo
tido de civil -me dijo con una de esas sonrisas
respondí de manera seca y cortante.
toca en una de las bandas que se enfrentan esta
n las manos. Se hizo un silencio muy incómodo entre nosotros, es
reguntó y luego se me acercó para susurrarme algo al oído pero un escalofrío
fruncía el ceño-. No me escape ni terminé con ella, fue Annie
alejarla mientras pasaba ese m
confía mucho en ti -rio mientras me tocaba el braz
ejarle claro que hablar de mi novia me gustaba-. Es más,
Lidia-. ¡No bromees, si s
forma de escaparme de las garras de Lidia; en ese momento me llegó un mensaje de texto a m
RDON SI TE MOLESTO PERO DE VE
le respond
SANDO MAL, PERO AL MENOS
MAL? PA
A MÍA ESTÁ UN
RÍA PREO
AMOR MIO, C
ERES AL
IAS E
RO Q
MUERTO QUE ENGAÑARTE. YA MISMO LA DESPACHO
, NO QUISIERA QUE TE DENUNCIA
RÉ CABALLERO PERO
Y CUIDATE M
n mi bolsillo y vol
a? -pregu
a pero al probarla la sentí diferente, tenía un gusto extraño; me pasé la lengua por el paladar m
preguntó Lidia,
a y sabía exactamente igual, mejor apurar el trago y
enía en la boca, escuché que estaban anunciando a la prim
l mal sabor con un beso? -preg
ovia -le dije con firmeza mientras la apartaba esta vez con
ó a dar vueltas, la visión se
ni hablar, miré hacia el escenario y vi a una muchacha de cabe
, estaba sólo en el barracón y totalmente desnudo, me incorporé levemente mientras intentab