Niña Mala y Billonaria
creo que solo la saludé, pero cuando la vi fumando en el jardín de la glorieta, con sus largas piernas al sol y su rostro de niña mala, reconozco que me
, un día antes de que me la llevara a casa, seguros ya de que solo le quedaban unos días de vida-. Aunque tú quedes
ra que, una vez cumplidos sus 18 años, fuera
i nos hemos visto unas cuantas veces. No tengo lo n
dijo Gloria. Luego tosió con fuerza. Sus pulmones se es
a la presidencia por su enfermedad. Es el mejor abogado del país y también es presidente de su propia firma de juristas, una de las má
erá tan fácil a ello
a, por eso tienes que est
o reírme cuando le comuniqué a Valentina
ar a la calle que lleva al edificio de la empresa. Miguel, mi se
el chófer mientras
seguro? -Me pr
la tarde. Ahora prefiero ir y
r muy convencido, pero lo vi tomar e
ien, señor? -pre
ece un buen centro
ardamos media hora en llegar. Miguel terminó de reprogramar las
os horas -Le d
as entre mañana y el viernes -Me dijo Miguel
y me encaminé a la entra
o qué quiere compr
no fuera pretencioso o diera a entender que quería ganármela de alguna manera, por lo que debía ser algo sobrio, pero significat
je a Miguel luego de haber recorr
dolescent
iera pedido que me explicara la cuadratura del
problema? E
ene su hijastra señ
uniforme escolar y la única vez que la vi con una ropa distinta fue el día del velori
y le preguntamos
con los pies más pesados a cada zancada. Entramos en
y buscando algo para una chica de... -¿Qué edad tenía Valentin
s, unas faldas desteñidas y algunas blusas con cosidos a la vi
es usan eso
diente-. Está muy a la moda
é crees
ó sin un solo atisbo
o a su hijastra en la foto qu
antes de entrar en el internado -Lo recordaba po
rece que, la niña de esa foto, no tiene
corta que llevaba la falda, me pareció que sí encajaba con esa ropa
dije a la joven que nos atendía-. Y t
on la ropa que acababa de comprar. Eran botas bajas, pero con suelas enormes y ca
ha sido dif
pero que a el
e duda, y hasta d
de que le vaya
mi secretario por cuatro años, era que nunca me mentía y
co la conozco. La única referencia que te
dudar. Ahora, la única que en ese momento sabía si la ropa le podía gustar o no era Valent
¿Ha pensado en sacars
ocurrió que, ahora que le llevaba unos conjuntos, seguro Valentina también querría estrena
or,
lo fácil que fue conseguir ropa para una ados
por firmar una adquisición empresarial de una compañía de alto riesgo por un billón de dólares. Desde luego, entramos y nos atendió una dependiente muy bella a la que
una adolescente de 16 años -dije
a una sección de lencería no tan atrevida como la que es
taba dispuesto a no dar marcha atrás y, al otro día, luego de q
ientras intentaba recordar el tamaño de los de mi hijastra-. No es muy muy, ni tan tan...
sus esposas o hijas. Nos pasó un conjunto y, sin atreverme apenas a revisarlo, lo compré. Luego le pasé, entre la tarjeta de c
e poder llevar esos bellos regalos a mi hijastra, que me
uánto me quedaba por