EL HIJO SECRETO DEL MAFIOSO
na
es que antes no me haya dicho tantas palabras crueles como ahora lo hace, sino que en este momento es que soy
pequeña-, pedí para acomodar a mis hijos, ya pensando que luego lo haré cambiar de idea para
ombrándome al final con un toque de repugnanci
do lo hizo conmigo. Podía tener todos esos defectos que él enumeraba, pero nunca fui alguien que no se ganara nada, si gracias a mis conse
arece que la estoy paga
ides que gracias a mi hoy tienes un negocio próspero- le señalé con el dedo y de
e no supo ver la basura de marido que tenía y creí en ti cie
- y ahora sí que me mató, literalmente, sentí que dentro de mí algo se quebró y las lágrimas que tenía retenidas para no deja
e levanté y no sé cómo, pero incliné mi cuerpo sobre la me
ida que se agarraba el lado de su
que no fui buena con muchas personas, pero tú que eres menos que yo me trates c
iste tú y menos habría durado tanto tiempo a mi lado hasta el punto de llorar para que te abriera las piernas, ¿pero sabe qué?, que te den hijo de una doble perra-, co
o mala con las per
de la oficina, - te voy a quitar a mis hijos, ¡Ya verás!, un juez me dará
es estaba sentada en el área de espera
oquista y estúpido corazón seguía amando a ese desgraciado, - te invitaría a mi boda, pero no quiero gente pobretona en mi ceremonia, de seguro
on payasos incluidos..., me aburren- le respondí y ella endureció
, que todo lo que dices es para molestarme, pero ahor
smo modo muere y Sebastián es un vil traicionero que le encanta cambiar una cola por otra en cuan
te los quitará y yo seré su nueva madre- dijo a mi espalda y seguí caminando, prometiéndome a
ús, y a mi mente llegó el recuerdo de que no tengo dinero y que si pago el bus para
o quizás con la esperanza de que haya más plata de lo pensado
ré cansada, - bueno toca caminar y aceptar que esta es mi realidad- di
ntenciado y espero que no cumpla por qué es
en el aire había un mundo lleno de problemas que nunca creí