Contrato de matrimonio con el CEO
ew York con un hermoso velo blanco que transmitía aún más, el espíritu navi
ncias durante ese mes, para centrarse en las fiestas, en las luces y en las decoraciones que cada esquina de las calles alberg
l verdugo, aquél a quién la niña llamaba papá hasta ese día, bajaba el arma resplandeciendo bajo la luz de las farolas cercanas y, aún humeante, dio media vuelta para abandonar el lugar, a
nte los años posteriores, la convirtieron en una mujer sin alegría, sin
ento, vivía con su abuela materna. Esa mañana, mientras se acicalaba para una nueva entrevista de trabajo, peina
ya no es la misma que hace diez años -regañó Sarah a su
ia casa. Llevo viviendo aquí sesenta años y nunca he tenido un solo
su abuela tomándola de
as entrevistas. Por mucho que intento olvidar el pasado y sonreír, no soy capaz. En
abello cálidamente, miránd
olver a vivir de nuevo, ser feliz y sonreír. No pierdas la espe
u nieta, y la apremió para baja
equipo en la sección de finanzas. Sabía que sería un cargo importante, tras licenciarse en economí
o pensativa unos minutos. "Vamos, tú puedes. Dale una alegría a la a
o golpeó con ella a un hombre q
sculpaba saliendo del auto y ayudando a ponerse en pie al h
rabajo y termino golpeado. Quizás sea el karma diciéndom
años, de pelo negro, algo largo y rizado, y barba algo larga que, a juego con sus ojos verdes, le daban
lo siento mucho. No fue
dente lo puede tener cualquiera. ¿Cuál es
revista de trabajo, que empieza
as. Tenía una alegría natural contagiosa, hasta
dió-. Ya que aún tiene media hora, ¿Aceptaría que la invite a un café? No suelo tener mucho tiempo as
uscas es una conversación divertida y amena. Yo iré t
a barba mientras la escu
Suerte con esa entrevista señorita Sarah. Si la pasa,
que era una persona extraña y curiosa, como un niño pequeño controlando el cuerpo de un hombre grande. Era alto
bitación con sillas clavadas en la pared como las de un hospital. Cuando Sarah entró, diez personas ya esperaba
estaban por comenzar. Era joven pero desprendía un aura de profe
uno, y entrarán en esta sala donde mis compañeros evaluarán a cada uno
Con alguno de los candidatos tardaban sólo escasos minutos, con otros hasta casi u
oficina, persianas de rejilla, paredes blancas grisáceas y plantas decorando alguna esquina.
ionó cuando la joven to
-respondió con rostro serio, que e
as en una pequeña libreta, a la p
de empresas, sin experiencia previa. Bien, ¿Por qué piensa que es la in
sponder. Simplemente quería un trabajo, tener unos ingresos estables y poder
o.
o que parecían unos baños privados, salió un hombre de cabello negro y rizado, ojos
ergencia -respondió entre risas y tomó asiento al l
o pensé que fuera el enca
Miró a su compañero y este le dijo la
sí tiene la base para ello, sin embargo, necesitamos ver la actitud que le pondrías a
mbre que clavaba sus ojos en ella, casi directo
Enzo, pero este con un gesto de la mano le hizo guar
eso, pero sacar la parte emocional en una entrevista con la idea de que el corazón del entrevistador sienta lástima, casi nunca funciona. Tras pensar un
así ir a tomarnos ese café que me
como si esa respuesta fuera una simple broma, el de
í. Si dice con eso que si ace
jefe? -dijo e
? -preguntó Sarah sin ent
re risas,
amente seguro. Esta chica es la que necesitamos en la empresa, lo sentí desde el momento que la vi salir de
le hizo un gesto con la cabeza. Ella se puso en
despacho, diciéndole a la joven que llamaba a l
Un trabajo a cambio de un café..." pensaba, pero realmente si estaba feliz. Sabía que s
iversidad y su graduación... sólo su abuela estuvo en todo eso, pues su madre, aunque desde el vueloyla observaba, no podía estar a su lado, y su padre, cumplía una conde
puso nervioso, y acercá
ieres... No te estoy pidiendo nada raro después del c
za secando su rostro con
uien que ya no está. Sé que estaría m
pero apenado por las palabras de la
es evidente que estaría orgullosa. Pero, ¿Sabes? Seg
zado una sutil sonrisa, por primera vez en muchos años, con el re