La Dama de la MUERTE
ar, mis extremidades parecen de plomo necesito hacer un esfuerzo sobr
ra edad hacía la muerte, mi piel se tornó algo flácida, seca y pálida, tengo un rostro acabado por el cansancio lleno de ojeras y a
a más que torturarme, nunca fui una mala persona a pe
el olvido entre las paredes de esta solitaria habitación, sin nadie que s
piso solo podía apreciar las copas de los árboles y el cielo azul acompañado de nubes, podía escuchar el cantar de las aves que tenían el poder de relajarme y hacerme olvidar de mi m
de risas provenientes del jardín, mis padres....
o de ellos entra en mi habitación, más que las sirvientas a ali
e visten o ayudan a bañarme, según lo hacen a escondidas, pero me doy cuenta; en ocasiones me dan
no sospecharía al verlo entrar con un maletín, le pedí que no volviera a venir a visitarme, no quería dejarme sola, me costó mucho convencerlo pero en realidad era mi última volun
llenado el cielo con el sonido de fuertes truenos y los relámpagos iluminaban el cielo, c
as de agua directamente hacía mí, como mi cama no estaba muy alejada
a todo de nuevo, no pude evitarlo, las lágrimas comenzaron a correr sin control, empecé a soltar fuertes so
earon, se acercaron por conveniencia nadie me quiso en realidad y prueba de eso
, pero la otra... quería venganza... quería verlos sufrir como yo estaba sufriendo
a por poder ven
a la boca, podía sentir como mi palma era manchada por algo cálido al apartarl
esta... me
la vista para toparme con un hombre de camiseta negra a los pies de mi cama estaba empapado, tenía el cabello blanco como la nieve y unos
mo en
ente y miró las puertas del balcón abiertas de par en par, para después
o tienes una pregunta mejor? – su voz era hi
s?... ¿Y qué
tu alma por ayudarte con tu venganza, y con respecto a quién soy respondo a muchos
erdida en la gran belleza de este hombre que tenía al fren
so quiere decir que yo ya mo
oferta, si es que aún sigue en pie; te diré los pros y contras de este acuerdo, si aceptas yo te curare, podrás vivir el resto de tu vida con normalidad tendrás salud
dejándolo atrás y claramente olvidando todo para emp
agradable para estar... así que si tomas mi mano aceptas la
tendió su mano, la observé perdida un poco, eso de entregar mi alma lo di
la perfección su aroma, era fresco y profundo, por un mo
a más que mis deseos de cobrarme tanto sufrimiento causado por mi "familia" con mis últ