Al Faro del Amor
. Mirando a Fannie Ruan, que estaba preparando los ob
"dineros" para los muertos y los metió todo en su bolsillo. Después de guardar todos los o
ar sus cosas. Tomó el cargador de su móvil y lo metió en su bolso del color bei
subieron al autobús, para ir
estaba bastante mojada y por estar en los m
o volver con su madre
¿cuándo has tenido un buen final? No sabes cuánto me avergüenzo cuando me encuentro con los conocidos, cada ve
su hija, le entraban ganas de llorar, su hija había estado
de la gafe!", dijo Fannie imitand
tos hombres. Al principio parecía que no había ningún problema, pero con
o en la cita, como por ejemplo dolor de barriga, vómitos, etc. ¡Ay! Por cierto
y mucha casualidad, pero algo
el pueblo, nadie se atrevía a tener alguna relació
muy normal, no exageres tanto. Además, en este mundo, cada hora, cada minuto, incluso cada segundo, muer
destino, eran algo que tenía que sufrir desde nacer, por eso
el en la mano y dijo, "No sabes nada, tenemos que quitarte la m
eblo donde estaba la casa de Fan
on la calle, se escuchó un ruido fuerte de coche; Rachel se
en un pueblo como este. Pero, ¿de verdad no tiene
s, sin duda estaban llenos de barro. Se dio la
o todavía mantenía viviendas de la antigüedad, sobre todo los templos de este pueblo
a lleva esperándole afuera bastante tiempo. ¡Dice que a l
estaba arreglando su camisa, y perdió la pacie
lada, su mirada era muy fría como si fuera un emperador mirando a su territorio. Esto h
no me gusta,
itó la corbata y lo
, se agachó y recogió la corbata q
otro para que lo pruebe". Al decirlo, se quitó el cinturón os
nos pasos hacia de
mbre, era la de tirar las co
no le gustaba, siempre decía
o ayudantes o incluso el mayordomo tenía una capacidad de reacción rápida. Exa
ueada con su hijo. Ella golpeaba la pue
portante. ¡Esto está relacionado con la sue
por fin se quedaba satisfecho con su imagen, tomó el móvil
livio. Cuando abrió la puerta, la madre
asa vieja de Rong, salieron una mujer con una niñ
s cosas que tenía que hacer una vez llegado al templo. Estaba pr
cada vez que venía al templo, su madr
. Que soy tu hija, no tu abuela, las palabras
u hija, se echó a reír y la miraba seriamente. Tiró un p
annie entró al templo y se dirigió dire
debes mirar, recuerda lo que te he dicho". Antes de ent
os, la persona debía ofrecerle una vela como ofrenda, además d
a la sala principal del templo. Una vez entrada ahí, los
eblo XH. Había donado mucho dinero para mantener el templo ance
asados de la familia Rong, que estaban envueltas en la luz del
el rezo de hoy se debe hacer por ti mismo". La digna mad
e era totalmente ateo. Si quisiera tener algo, no pediría a Dios, sino lo consegu
de su madre no podía mostrar su verdadera actitud