El Destino Nos Entrelaza
tación. Después de encender la calefacción, se sentó en el escritorio y liberó el borrador que
o en su escritorio y
uego. Y si con uno no funciona, ¡será con dos!", p
an apagadas, pero la del o
as seguidas, Cassie se sint
anse al infierno! ¡Los hombres son unos
mostrando bien grande: 'FALLASTE'. Luego de eso
e daño? ¡¿Te has muerto sin usarlos?!", "¡Ey! ¡Terminé la 12ª temp
uipo también tenía
12 etapas. ¡Te golpearon como a un perro cuando en
sonó su celular. Y tras cerrar
s a estas
mari
on solo dos simples palabras, Cassie se
ran fortaleza?, pregun
do, pero seguía
da. "No voy a llorar por un cortecito. Po
respondió con cierta impaci
última partida. Con una sonrisa ladeada, dijo con
molió sus escasas do
túe frente a un presidente de una
ida y dijo con desgano: "Oh... bueno...
hace media hora", resp
entenderlo y dijo: "Está
suspiro, Dylan c
oscurecía, Cassie hizo una mueca y d
a de su compañero de juego: "¡Oye! ¿Jue
, Cassie encendió el micrófono y
, Cassie. Ve
a en esa voz. Cassie pensó que estaba alucinando. Sonriendo
ndió confundido
sa voz le result
só el canal y se dio cuenta de que había tres per
tó y soltó un:
esó: "Este... Ya que tu novio te insta a dormir,
s. "¿Esto es en serio? Te dije que dormiría", dijo Cassie algo enfadada.
ace cinco minutos", dijo
ró que el enlace del juego se h
da de Dylan. Cassie estaba furiosa, pero aún así, mantuvo el temple y
aran del edificio", di
tó el wifi de todo el e
ese malvado capitalista, pero er
vigilarte. Te garantizo que estarás sufic
y se apresuró a detenerlo: "¡No, no, n
uavizó su tono y se desp
ó desanimada: "
de la Villa
de franela blanca. Las comisuras de su boca se levantaron lig
sde hacía dos días, por tanto, si no descansaba bien,
actas correspondientes en un sobre de papel kraft, tal como se lo hab
ich y el café que le ordenó comprar a su as
la noche anterior, así que es
ía las mejillas hinchadas como un pequ
nte minutos en llegar a la
rostro. Cassie había olvidado llevar una bufand
su propia bufanda. Cassie ya imaginaba su próximo mo
rumpió con un tono irresistible: "Si te res
rgos y huesudos dedos envolvieran la bufan
suavizó su aspecto. Debido a esa pequeña distracción, Cassie
antes había usado, Dylan le
des llorar, pero no clame
intió con
ria no son los cadáveres, sino los grito
en el frío ataúd durante tres d
afrontar ese momento, no pudo evitar