LA MUJER EN MI
á horrorizada. ¿Cómo pueden hacerme esto? Ellos saben lo abusivo que es, no es un secreto. A cada rato hay un escánda
un hecho. Él siempre ha estado enamorado de ti, desde que eran niños. ¿No recuerdas que siempre andaba detrás de ti? Ya lo habíamos pactado, desde ese tiempo. ¡Felicidades cariño, tu historia de amor se
gel, aceptando las felicitaciones de todos, mientras tiene una de mis manos entre las suyas y me la besa
núas siendo. Gracias por aceptarme como el hombre que te hará feliz la vida e
gno a mi destino. Luego de otra hora de sufrimiento, al fin nos marchamos. Luis se despide besándome
da tanto por el espejo retrovisor, pero no dice nada. Al llegar a la casa, subo corriendo las escaleras y me encierro en mi habitación. No quiero ver ni h
ra una pesadilla! Ese Luis es insoportable. Hoy tengo un examen, me visto rápido. Miro mi anillo de comprom
cabello lo traigo siempre recogido en una coleta, es castaño oscuro y me llega más allá de la cintura, mi madre no ha dejado que lo corte. Mis ojos son verdes oscuros, que contrastan con mis largas pestañas negras, y mi piel cobriza. Mi abuelo me dice, q
tiene que ver nada con mi personalidad escurridiza. Él hizo oídos sordos, obligándome a aceptarlo. Así que siempre trato de parquear, lo más alejado que puedo del Insti
taba muriéndome de ver como Luis sonría a todos y se hacía el más enamora
évalo bien, los dos saldremos ganando. Tú tendrás tu libertad y yo, mi herencia. Estaremos tres años casados, y cada quien por
res años, y ya. -Respondí feliz al sentir que se me quitaba un gra
tiempo, no puedes tener relación alguna. -Di
por mí
me acostaré con quien se me
rata de ser discreto, para que nuestros padres no sospechen. Otra cosa. ¡No me t
Luis acercándose insinuante, mientras roza con sus
rta que mis padres me quieran casar, si le digo que yo no quiero me saca de aquí en un segundo en las narices de todos. No olvides que ya soy mayor de edad, no estoy obligada a obedecer a
arme con tu abuelo! Así que no te preocupes. Y no me gusta que me amenacen Bela, deberías ir
jor nos llevamos bien, como dos