El bebé de mi cuñado
isto teclear sin parar, con sus dedos largos y delgados, relamerse sus finos labios dejando una capa fina de
a cerezas f
EO y lo hizo volver a la realidad- ¿Te enteraste
rodeó a Helena alejá
sabí
ro si estamos t
A
tú ta
, pero no puedo dejar a mi herm
nte te lo vas a perder? ¡
és de la boda
en esta va a
n divertidas y s
a su casa y estar con su hermano, no quería trasnochar y
ndo, vuelvan a sus puestos-
fueron frustradas de no haber podido co
n hablando de la
ién vas a
toy grande para eso,
nito solo, además no tengo ningún vestido p
No podés desaprovechar esta oportunidad, tenés que ha
n a las demás, sino sería blanco de burlas para siempre, además podría intentar empezar
rio lo
cuando Carmen
la señora al ver a Helena con la misma ropa de la oficin
a ir co
s una mujer hermosa, ten.
Y
vestido de mi juventud, sé que es
o Carmen, m
usiasmada y para su su
e hacían dar volumen a sus caderas estrechas, en el escote varios botones que se cerraban hasta el final de su delgado cuello terminando en dos solapas, con mangas largas pero traslúcidas dá
s prec
enserio has sido
ora anda que se te
i.
uitándole la coleta del cabello dejando caer su p
sta, hace mucho que no iba a una, debía admit
rrida de la historia- exclamó
, te dije que no ha
eca, sentados en unos sillones de cuero bebiendo Whisky, como si e
r más aburr
o
o momento refregándose contra la entre
menos celoso. El joven heredero bebió de un solo tirón el líquido anaranjado de su vaso, necesitaba emborr
ue la pelirroja entraba al bar tímidament
nja!- se burló
eso? ¿Del arma
todas llevaban vestidos ajustados a la moda, de esos con lentejuelas que relucían bajo las luces del lugar, con zapatos de cuero y de taco fino, bolsos en c
le? ¿La misma Hele de la ofi
precios
vestido
ustedes también
de bebida blanca, todas levantaron sus pequeños vasos de cristal mientras la c
bebo- recha
da, relájate vamos-
o que volver
upes, nosotr
tete un poco, se nota que
sobre los hombros y acercó
nueva amistad, pasado pisado –
ería llevarse bien con esas mujeres, espec
enido cerrando los ojos con fuerza al sentir el ardor en su garganta, lo que no vio es que las demás chicas bajaron los vasos
isa burlona, su amigo Erik no estaba mejor que él, le hizo
chicas!- excl
i tengo
hicas! Esa si que es nueva ¿El joven s
, pero cuando vio entrar a las mujeres de más de 1.70 de piernas largas cont
laudió
riendo los brazos para recibir
rroja es
es mi
riente y con la mirada felina al joven CEO, sentándose
con voz grave, mirando a la
ue la realidad se le deformara. Tocó el rostro de la mujer y lo besó salvajemente, sintiendo
Te la vas a devorar
chando, estaba desesperado po
pent-house
esario, haciendo encender aún más los deseos del joven quien
ró al oído de la
uieras que sea cariño- exclam
n el medio de la pista de baile, veía a sus nuevas amigas danzar alrede
udiéndola y haciendo que Helena se sintiera aún peor. Un calor fuerte comenzó a s