Un contrato para amarte (Casada con el CEO)
es una niña para actuar así -su
ia y la puso de todos modos en una pequeña bolsa. Estaba dispuesta a irse de esa ca
tos afuera se hic
eña bolsa rosa sobre su espalda y abrió la p
-le preguntó la señora, notando
ó caminando firme
a el final. Casarse así era una locura, nunca pe
a su esposo cuando notó
sus pasos y salió por la puerta sin mirar atrás.
aciendo? - Escuchó
aly y la estaba esperando al otro lado de la calle con su automóvil. Su amiga es
! -aseguró su mad
día mirar a un lado y ver a sus padres impidiéndole ir. Tan pronto como entr
-preguntó Sa
s hablaron sobre el matrimonio esta mañana. Pero pronto se
-dijo Ayme cubriéndose
idea de cómo sería su vida ahora. Tenía un sueño, quería terminar la universidad y come
habló. -Luca me llamó y
... - Aym
staba Saly, Ayme sabía que la Sra. A la
pasó, no le importa
y aceptara a su amiga en casa. Después de todo, ella t
? -le preguntó
le respondió sonriendo y
mó a su mejor amiga y olvidó que necesitaba un lugar para q
atención quitándose el
casa de su amiga, respiró hondo y siguió a su amiga fuera del auto. Estaba nerviosa,
, no s
nfancia de ellas, apareció en la
de sus mejores amigos y no cambiaría su amistad por nada. Crecieron juntos y sie
. Cuando Saly lo llamó, se desesperó. Ayme era su
bre el pecho de su ami
n amor, la chica no merecía ese futuro. Más aún cuando él estaba allí, para darle el amor que merecí
lución. -Eso era lo
tó en su pecho, pudo ver en los ojos de Luca cuánto amaba a Ayme y dejó completamente roto su c
r -habló acerc
alejó de su amiga
n sus padres. ¿Qué podrías hacer para sacarles de la cabeza esta
.
nguna llamada" es la que no entendiste? -Le
y bien, le advirtió tan pronto como entró en su habitación, pero,
encia. -Su padre amenazó con cambiar mi
o las lágrimas. No podía perder ese
te desde el otro lado de la mesa. - Si me molestas de nuevo, so
amente de la oficina del jefe y cerró la puerta, a pesar de que había estado en el cargo durante
on la cantidad de trabajo que tenía y no podía dejar de pensar en la conversación que había tenido con él durante la tarde. Ya era
de inmediato -le ordenó a su secr
ra la puerta, mirando hacia abajo se acerc
lo rehaga todo de nuevo -ordenó señalando una pila de papeles encima de su esc
e la habitación. Otra cosa que todos sabían sobre su jefe era que León s
nte una ducha y descanso. Caminó directamente hacia el ascensor y se bajó, no mi
tenegro -el valet habló entregand
tendría una respuesta de León, pero por ahora tendría que
e y se permitió sentir un poco más. Cerró los ojos y suspiró por millonésima vez ese día cuando
-respondió se
de está el "¿por qué tardaste tanto en llamarme?" -dijo
as de su amigo no dijo nada, so
s, hace rato no nos vemos. Además, te va a venir my bien despejarte
as nueve y media de la noche. T
-preguntó
e siempre. Eri
la vuelta al auto rumbo a e
iable, a le gustaba beber con ellos, sus
to, un valet apareció a su lado y le quitó la llave de las manos. Sus amigos a
o frecuentaban personas de la alta sociedad y no había uno que no conocier
- Reconoció l
eguntó el camarero a León,
r -respond
a él. Eric siempre había sido el más animado de los tres y el que más hablaba.
escucharon la voz de
ric. Estaba de traje, el que llevaba en su trabajo. Fue abogad
le respondió. - Solo
is al camarero señalando con
o estabas respondiendo a nadie siguió hablando Luis, tomand
ninguno de ellos para hablar de los problemas del trabajo, de la vid
á sentado aquí -advirtió Eric a su ami