Un Ángel en alquiler
es de semanas caóticos o sus días de sema
que hacer. Frustrada, se acostó boca arriba en su viejo sillón con las piernas c
cachorro?" Pens
onar tu mal de amor" Le di
cubrió su cara con fuerza mientras grit
ués aquel joven apuesto que solo quería jugar c
ción en su vida sin saber los peligro
hacer ahor
joven estaba comenzando a arrepentirse de reaccionar de esa manera con Thomas. ¡Él iba a ser su fuen
entos de lado y ceder a sus deseos" P
n falsas promesas de amor eterno? ¿Y no podía entregarse
pretando una vez más e
mento la desconectaron de su drama, de un salto atl
omas" Pensó c
epcionó, por suerte no era su jefe, aun no ha
ndose a un lado para que su herm
a en su rostro, aquella por la que
estás aquí?- pregunt
ste se sentó a su lado y no pudo evitar abrazarlo con fuerza-
un puchero, impidiendo que el joven
protestó- Te t
nada de regalos... no necesito nada....- La rubia
i exámen!- exc
!- exclamó besándolo en la frente, haciendo que el joven se limpiara bruscamente en la zo
ojos en blanco-
ue persigas tus propio
ndo para sacar a tu papá de la cárcel ¡Ya vas a ver que lo voy a conseg
larmada mientras corría hacia
rimas corriendo por sus mejillas finalmente pudo calmarse. Pero a
medicamentos no e
que me diste pagué una deuda de mi hermana. ¡No se lo digas! ¡Por favor!- dijo desespe
arlo y frotar su espalda- Tranquilo, no diré
puedo t
debes estudiar. Déjas
tá
obrino en sus brazos no pudo dejar
brazados en el sillón que la puerta se
se calló al ver a la joven y a Tati en
lágrima traicionera- Está bien tío Danny, ya me iba, mi hermana va a despertar en cualquier mom
aludaron con la ma
aba que Celeste protestara, que le dijera que no era necesario que la ayude, se sorprendió al ver que no decía nada
Tat
efe los problemas de salud del chico, lo costosa que era la universidad y las deudas que ten
de consuelo. Para su sorpresa su jefe malinterpretó la situación y cuando se quiso dar cuenta ya estaba siendo besada por él. N
nny
amo
e su jefe, evitando que se volviera
e dio cuenta que se había propasado, en vez de consolar a su
llave- fue lo último
na, entre sus miles de papeles y cuentas habían sido siempre su lugar seguro, pero ahora ni siquie
ás para una sali
ra la maldita puerta antes de entrar a su oficina, todo lo
Luego del trabajo, se iría a su casa a hundirse en la so
nde es
ante de su emple
e la ciudad, al parecer el joven tenía un gusto particular por los lugares donde había mujeres hermo
sorpresita para
llevado a la perdición cuando lo llevó a aquel bar donde conoció a su ángel. Pero el
para una parte más privada, no muy diferente al bar donde trabajaba la joven. Pasaron sin problemas
prendido y miró a Bruno en
emente me cansé de ver esa cara de perro mojado y te traje algo
es hasta que cayó en seco sobre el mueble, hundiéndose en los cojines. Sin dejar de clavarle sus ojos negros a la dama, el ángel co
ujer era igual de magnífica que su verdadero ángel, no podía. Sin querer ofenderla dejó que t
de una explicación. El joven volvió a levantar los hombros sin saber que decir
que estás perdidam
us manos, quizás por el alcohol en sangre, se permitió so
richo más de su jefe, pero ahora caía en la cuenta de que realmente había caído ante sus encantos y eso no era nada bueno.
a a ser para problema- Bruno se sentía incapaz de decirle la verdad, pero rogaba que el joven entrara e